Los Testigos de Jehová sí son parte del cristianismo, en primer lugar. De ahí que deben ser incluídos en este grupo. Sin mebargo, aún dentro del cristianismo hay muchas diferencias entre los mismos grupos, ya sea por razones de caracter doctrinal o histórico. Así tenemos varias ramificaciones:
Catolicismo: incluye a la Iglesia Católica Apostólica Romana, que incluye fieles de tradición latina y otras comunidades Católicas Orientales.
Iglesia Ortodoxa: incluye la Iglesia Ortodoxa Oriental, las Iglesias Orientales Ortodoxas y la Iglesia Asiria Oriental.
Protestantismo: este grupo incluye numerosas denominaciones y doctrinas como: anglicanismo, luteranismo, Bautistas, metodismo, adventismo y pentecostalismo, los que descienden, directa o indirectamente, de la Iglesia cristiana Occidental (Católica) debido a la Reforma del Siglo XVI. Muchos se identifican simplemente como cristianos, siguiendo sólo lo está escrito en la Biblia, como muchos fundamentalistas.
Hay otras confesiones cristianas que han surgido de cismas posteriores a los relacionados con la Reforma Protestante, y que por tanto no están en comunión plena con la Iglesia Católica. Así, por ejemplo, la Iglesia Católica Antigua y la Iglesia Católica Apostólica Brasileña, los lefebvrianos, entre otros, que sostienen posturas contrarias a la católica en temas puntuales: rechazar la suprema autoridad del Papa, sostener que el papado está vacante, etc.
Otras: la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (llamados también mormones), los Testigos de Jehová, y muchos más.
Catolicismo: incluye a la Iglesia Católica Apostólica Romana, que incluye fieles de tradición latina y otras comunidades Católicas Orientales.
Iglesia Ortodoxa: incluye la Iglesia Ortodoxa Oriental, las Iglesias Orientales Ortodoxas y la Iglesia Asiria Oriental.
Protestantismo: este grupo incluye numerosas denominaciones y doctrinas como: anglicanismo, luteranismo, Bautistas, metodismo, adventismo y pentecostalismo, los que descienden, directa o indirectamente, de la Iglesia cristiana Occidental (Católica) debido a la Reforma del Siglo XVI. Muchos se identifican simplemente como cristianos, siguiendo sólo lo está escrito en la Biblia, como muchos fundamentalistas.
Hay otras confesiones cristianas que han surgido de cismas posteriores a los relacionados con la Reforma Protestante, y que por tanto no están en comunión plena con la Iglesia Católica. Así, por ejemplo, la Iglesia Católica Antigua y la Iglesia Católica Apostólica Brasileña, los lefebvrianos, entre otros, que sostienen posturas contrarias a la católica en temas puntuales: rechazar la suprema autoridad del Papa, sostener que el papado está vacante, etc.
Otras: la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (llamados también mormones), los Testigos de Jehová, y muchos más.